El Ministerio de Seguridad, bajo la dirección de Patricia Bullrich, ha implementado nuevas normativas para el uso de armas no letales por parte de las fuerzas de seguridad. Según la Resolución 2024-704, publicada en el Boletín Oficial, las fuerzas de seguridad utilizarán estas herramientas en situaciones donde el uso de armas letales sea excesivo o pueda poner en riesgo vidas. Además, se establece una capacitación obligatoria para el personal autorizado a utilizar estas armas, proporcionada por la Dirección Nacional de Formación y Desarrollo Profesional de la Secretaría de Seguridad.

El comunicado también especifica que los miembros de las fuerzas deben identificarse a viva voz como agentes de seguridad antes de usar armas no letales, a menos que hacerlo pueda suponer un riesgo de muerte o lesiones. Las armas no letales disponibles incluyen pistolas que inmovilizan mediante descargas eléctricas, pistolas con municiones irritantes, y gases paralizantes. Estas herramientas están diseñadas para inmovilizar sin causar daño letal y su uso está justificado en casos de persistencia en el ataque, intentos de fuga de delincuentes, o tras la comisión de un delito.

La normativa asegura que el manejo de este armamento se ajuste a los reglamentos de cada una de las Fuerzas Policiales y de Seguridad Federales, alineándose con los nuevos estándares de seguridad. Estas medidas buscan una respuesta proporcional y adecuada de las fuerzas de seguridad, evitando el uso excesivo de la fuerza en situaciones que no lo ameritan.