El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, promulgó una reforma tributaria que incluye la devolución de impuestos a turistas extranjeros mediante el sistema «Tax Free». Esta medida tiene como objetivo hacer más asequibles los destinos brasileños, atrayendo especialmente a los argentinos, principales visitantes internacionales. La decisión complica los esfuerzos de Daniel Scioli, embajador argentino en Brasil, para posicionar destinos nacionales como la Costa Atlántica como una alternativa atractiva.

Un ahorro significativo para los turistas
El programa «Tax Free» permitirá a los turistas extranjeros recuperar hasta un 22% de los impuestos sobre bienes y servicios adquiridos durante su estadía en Brasil. Será aplicable a quienes permanezcan menos de 90 días y no residan en el país. Con antecedentes exitosos en países como España y Japón, esta medida pretende aumentar el consumo y beneficiar sectores como la artesanía y el comercio local, según Marcelo Freixo, presidente de Embratur.

Impulso económico para Brasil
En 2024, Brasil alcanzó un récord de 6,65 millones de turistas extranjeros, un aumento del 12,6% respecto al año anterior. Con el «Tax Free», se espera una inyección de más de 2.000 millones de reales (330 millones de dólares) a la economía, lo que generará empleo y fortalecerá el comercio en destinos clave. Río de Janeiro liderará el programa desde julio de 2025 como parte de una experiencia piloto que buscará consolidar su atractivo turístico.

Un desafío para el turismo argentino
La implementación del «Tax Free» coloca a Brasil en ventaja frente a Argentina, donde la crisis económica limita el atractivo de los destinos locales. Scioli deberá diseñar estrategias competitivas para destacar las bondades del turismo nacional y evitar la fuga de viajeros argentinos hacia Brasil. En este escenario, el diferencial costo-beneficio de vacacionar en el país vecino podría representar un reto significativo para las políticas de promoción turística argentina.