En medio de la inquietud expresada por el sector productor de alimentos ante la medida del ministro de Economía, Luis Caputo, de abrir las importaciones para estabilizar los precios internos, desde el Gobierno defendieron la acción, argumentando la necesidad de fomentar una «sana competencia«.

Terminemos con la farsa de ‘cerremos la frontera para jugar entre nosotros a vendernos cosas’”, disparó el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien en su habitual conferencia de prensa de todos los días, defendió la iniciativa ante las críticas de la Unión Industrial Argentina (UIA) que hablaron de “trato desigual” para con el sector.

Desde la central industrial habían expresado su preocupación por la apertura de las importaciones indicando que “afecta seriamente la competitividad de las empresas que operan, producen y emplean en el país”. De hecho es un tema que sobrevuela cada crisis económica en el país y que se ha aplicado en distintos periodos históricos con pésimos resultados.

“Respetamos la opinión de la UIA y de hecho conversamos con todos los sectores. Entendemos que los supermercadistas hablaron de cómo se habían excedido en la remarcación y en virtud de esa situación el ministro Caputo tomó la decisión de, dentro de las circunstancias, el contexto y las limitaciones que tenemos en materia cambiaria y en disponibilidad de reservas, empezar paso a paso a abrir la economía con productos básicos”, dijo Adorni al respecto.

A lo que agregó: “No va a ser un problema de competitividad por las palabras de los supermercadistas, por los amplios márgenes que tenían devenidos de precios excesivos en virtud de cubrirse de algo que no pasó: de un dólar de 2.000, 3.000 o 10.000 pesos; de un escenario catastrófico que no llegó a tal punto, a Dios gracias, más allá del momento complejo. Nunca el mercado estuvo tan cerrado como en los últimos 15 o 20 años”.

“Hay que tener cuidado cuando uno habla de cerrar para proteger. No hablo de la UIA. En términos generales cerrar la economía suele beneficiar a unos pocos y perjudicar a muchos”, destacó el portavoz de la Casa Rosada.

En referencia a los dichos de la UIA, el funcionario cercano a Javier Milei concluyó: “Cuidado con cerrar el país para proteger la industria nacional porque ha dado muestras de absoluto fracaso. Terminemos con la farsa de ‘cerremos la frontera para jugar entre nosotros a vendernos cosas’. Lo único que hacemos es perjudicar a todos los argentinos, en especial al que menos tienen”.