Desde el 1 de octubre, cuando comenzó la vigilancia intensificada de dengue en Salta, ya se reportaron 18 casos sospechosos. Si bien las primeras muestras resultaron negativas, se siguen haciendo estudios para confirmar o descartar.
El dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti. Cuando este se alimenta con sangre de una persona enferma y luego pica a otras personas les transmite esta enfermedad.
El mes pasado las autoridades sanitarias comenzaron a capacitar a los equipos de salud de todo el territorio, de cara a la presente campaña, que se extenderá hasta el 31 de mayo del año próximo.
Ayer por la mañana se realizó una reunión entre referentes de Salud Pública y jefes comunales de toda la provincia en el Foro de Intendentes, para tratar este tema y coordinar acciones.
La semana que viene habrá una reunión a nivel nacional sobre Zoonosis y Vectores, en Buenos Aires, donde el dengue será uno de los temas a tocar.
«No vamos a dejar de tener dengue en Salta. Queremos controlar para, ante un eventual brote, poder mitigar el gran impacto que puede generar en la salud, en lo económico y en lo social», planteó la directora general de Coordinación Epidemiológica, Analía Acevedo.
La referente mencionó que Salta aporta más del 50% de los casos de dengue a nivel nacional y que, por eso, hay que «trabajar intensamente en la prevención».
Cuando comienza la vigilancia intensificada, los municipios hacen descacharrado selectivo, control de basurales y microbasurales, saneamiento y ordenamiento ambiental, desmalezado y todo aquello que pueda prevenir criaderos de mosquito.
Desde la Dirección Nacional de Vectores realizan control focal, lo que implica ir a los domicilios y tratar de controlar todos los recipientes que sean potenciales criaderos de mosquitos, entre ellos los pozos ciegos.
Desde el equipo de salud se abocan a la búsqueda de personas con cuadros febriles, con control, seguimiento y monitoreo de pacientes detectados con dengue.
«Se trabaja como estrategia de gestión integrada, en la que participan todos», planteó Acevedo. «Debemos comprometernos al trabajo en conjunto con el equipo de salud, porque las responsabilidades son compartidas», agregó.
La funcionaria comentó que realizan visitas a las áreas operativas para hacer mesas de gestión, en las cuales, según dijo, «se articula muy bien». Comentó que las áreas del norte están «muy trabajadas» y que igual siempre es necesario retomar algunas actividades, sobre todo en esta época.
«En las mesas de gestión es fundamental que participen distintos actores sociales. Mientras haya más participación de la comunidad va a haber más conciencia y compromiso de la población en la prevención y control del vector», manifestó Sonia Guanca, jefa del programa de Enfermedades Transmitida por Vectores y otros Reservorios.
Tareas de control
Desde Epidemiología, en el marco de la vigilancia intensificada priorizan algunas estrategias, como la notificación negativa y la notificación temprana, ante un eventual caso sospechoso.
La notificación negativa significa que los establecimientos de salud deben informar diariamente que no presentan casos de dengue.
Con una notificación de alerta temprana se activan los trabajos que tienen que hacer de manera conjunta el equipo de salud, la Dirección Nacional de Vectores y el municipio implicado. Desde Epidemiología reconocieron que es «complicado» tener la notificación temprana de los casos y evalúan cómo optimizar el trabajo.
Explicaron que cada área operativa debe notificar el caso sospechoso ante el primer contacto, para que se desencadenen una serie de acciones que requieren el trabajo articulado de muchas personas.
Las autoridades sanitarias se preparan para afrontar esta campaña, sin saber cómo se va a comportar el virus este año. Las consecuencias que esto tenga dependerán de las acciones que todos los actores hagan en conjunto.
Acevedo manifestó que en «esta etapa de prebrote es muy importante tener fortalecida la red de laboratorios». Comentó que el laboratorio de referencia es el del hospital Señor del Milagro, que trabaja en conjunto con el de Enfermedades Tropicales, de Orán, y con los de Embarcación, Salvador Mazza y Tartagal. Según dijo, estos «tienen capacidad diagnóstica y reciben muestras o derivan, para resolver los casos localmente».
La experta evaluó que es posible que Salta tenga muchos casos de dengue en comparación con otras provincias, entre otros motivos porque es «la que más notifica».
f:El Tribuno