La jueza estadounidense Loretta Preska ha permitido que los demandantes del caso de la expropiación de YPF inicien embargos contra Argentina, desestimando la solicitud del Gobierno para extender el plazo de presentación de activos en garantía. Para embargar activos del Estado argentino, deben cumplirse tres condiciones simultáneamente según las normas estadounidenses: que Argentina sea dueña del bien, que se utilice para una actividad comercial en EE.UU. y que esté vinculado a la actividad comercial objeto del reclamo. Argentina también enfrenta otro pedido de embargo de fondos buitre en EE.UU., actualmente en apelación, destacando la complejidad y la duración prolongada de estos procesos legales, lo que subraya la necesidad de una estrategia gubernamental coherente.