Donald Trump ha sido electo presidente de Estados Unidos y su plan económico podría impactar en la Argentina. Una de sus principales propuestas es aumentar los aranceles a productos extranjeros, con especial foco en China, lo cual podría encarecer las exportaciones argentinas. Según Tom Wilson, de Schroders, esta medida podría devaluar monedas de mercados emergentes, mientras que Leonardo Chialva, de Delphos Investment, advirtió que un impacto en China podría reducir el valor de los commodities, afectando directamente a la economía argentina.
Además, Trump se comprometió a extender su reforma fiscal, lo cual podría aumentar el déficit de Estados Unidos y presionar las tasas de interés. Esto complica los esfuerzos de la Reserva Federal y podría hacer menos atractivos los bonos de países emergentes como Argentina. En paralelo, el enfoque de Trump hacia el sector energético promete un impulso para las petroleras, mientras que sus políticas menos comprometidas con el cambio climático podrían favorecer la producción local de combustibles fósiles, lo que también podría incidir en el precio del petróleo.
El fortalecimiento del dólar ya se ha evidenciado, lo que encarece los productos argentinos y puede afectar la competitividad de sus exportaciones. El economista Sebastián Galiani resaltó la necesidad de flexibilizar el cepo cambiario en Argentina, dado que una revalorización del dólar podría acentuar la presión económica sobre el país. También se espera la próxima decisión de la Reserva Federal sobre las tasas de interés, ya que un posible ajuste podría influir en los mercados emergentes y, en particular, en el comercio exterior argentino.