La Unión Europea y expertos abogan por la reactivación de la energía nuclear como parte de los esfuerzos para cumplir los objetivos climáticos europeos. A pesar de enfrentar desafíos como la falta de inversión y los sobrecostes, la energía nuclear se considera una fuente de energía con bajas emisiones de carbono. La necesidad de encontrar alternativas al gas ruso y los compromisos de reducción de emisiones han renovado el interés por la energía nuclear en Europa.
Los líderes europeos se comprometen a apoyar la expansión de la energía nuclear, incluyendo la ampliación de la vida útil de los reactores existentes y la construcción de nuevas centrales nucleares. Sin embargo, se reconoce la necesidad de mantener altos estándares de seguridad y protección, así como de fomentar la investigación y el desarrollo en el campo nuclear.