Mauricio Macri criticó nuevamente a Aerolíneas Argentinas, calificándola como una «ruina sin salida» y proponiendo un «plan de desarme urgente». En un comunicado, el expresidente responsabilizó a los convenios sindicales de pilotos, mecánicos y tripulantes por el funcionamiento costoso de la empresa estatal. Además, apuntó contra Pablo Biró, líder de la Asociación de Pilotos, acusándolo de perjudicar a la compañía y a los argentinos con «privilegios vergonzosos».
Macri propuso tres alternativas para resolver la situación de la aerolínea: iniciar un proceso de quiebra, dividir la compañía en diferentes firmas o vender sus activos a competidores privados. Destacó que la mayoría de las pérdidas provienen de las rutas internacionales, donde la competencia privada ya opera sin subsidios. Además, recordó su gestión con la «Revolución de los Aviones», donde se incrementó el número de pasajeros y se incorporaron aerolíneas low-cost.
Finalmente, advirtió que Argentina debe elegir entre mantener el actual modelo deficitario de Aerolíneas Argentinas o avanzar hacia un mercado aéreo más abierto y competitivo. Macri subrayó que su postura en torno a la privatización de empresas estatales coincide con las políticas de apertura que promueve el presidente Javier Milei.