Ciberdelincuentes han aprovechado diversos canales de comunicación como las redes sociales para crear noticias falsas o ‘fake news’ con imágenes manipuladas.
El aumento de fraudes financieros en línea ha sido impulsado por el uso de tecnologías modernas y la difusión de noticias falsas en redes sociales, así como por la popularidad de los deepfakes.
Los ciberdelincuentes se valen de nombres y logotipos de instituciones financieras, además de deepfakes (imágenes manipuladas de directivos o celebridades), para engañar a los usuarios mediante falsos artículos de noticias, anuncios y videos solicitando grandes sumas de dinero.
Han surgido casos notables de suplantación de directivos de grandes empresas o bancos reconocidos, los cuales se vuelven aún más preocupantes cuando resultan en pérdidas millonarias.