La comercialización de animales vivos, prohibida en ferias y mercados barriales, fue desarticulada en el barrio Solidaridad gracias a la intervención de vecinos que denunciaron esta práctica ilegal. La Municipalidad de Salta actuó rápidamente tras ser alertada sobre animales en condiciones deplorables.

Durante el operativo realizado por la Patrulla Ambiental, se encontraron alrededor de 50 animales, entre gallinas, gallos, patos, codornices, conejos y cobayos, hacinados en cajones de plástico y jaulas metálicas, sin acceso a agua ni comida. Este hallazgo generó indignación entre los residentes que presenciaron la escena.

El feriante responsable fue multado e imputado por infringir la Ordenanza 3.880, que regula la tenencia y comercialización de animales vivos en la ciudad. Además, se labró un acto de infracción exigiendo el retiro inmediato de los animales.

Desde la Municipalidad destacaron que estas prácticas, además de ser un acto de crueldad animal, representan un riesgo sanitario para la comunidad. Subrayaron la importancia de respetar las normativas vigentes y fomentar un trato digno hacia los animales.

Este caso resalta el valor del compromiso ciudadano para combatir estas irregularidades. Las autoridades instalaron a los vecinos a seguir denunciando situaciones similares, recordando que el bienestar animal es una responsabilidad compartida entre el Estado y la comunidad.