Aseguran que no permitirán el «festival de los planes sociales» y que se debe incentivar la inversión privada. Piden, además, sincerar el dólar y la inflación.
El presupuesto nacional 2023 aparece con el riesgo de correr la misma suerte que el año pasado y debe saltear el cerco opositor para su aprobación. El proyecto ya fue presentado y será analizado ahora por las diferentes comisiones. Mientras tanto, legisladores de la oposición advierten algunos puntos que prevén un reñida discusión en Diputados.
Uno de estos puntos es el gasto social. Se conoció que el aumento en este ítem será de un casi 72% en relación a este año, y del cual $12,95 billones estarán destinados para seguridad social, que incluye jubilaciones, pensiones y planes sociales.
El diputado nacional Carlos Zapata, de Ahora Patria, pidió que el presupuesto plantee una «situación clara», para que los inversores crean en el país. Pero destacó que será difícil por el «gasto público ocioso», en referencia a la «intervención en los planes sociales. Es un gasto innecesario sostener a las organizaciones sociales que hacen un Estado paralelo. Mientras por un lado se les exige a los empresarios que paguen impuestos, las organizaciones sociales impiden trabajar y producir», describió.
Zapata aseguró estar en conocimiento de que en la partida de transferencias corrientes hay un incremento de más del 100% que significa «el festival de planes sociales», cuando, indicó, lo que habría que hacer es» ayudar a las empresas para que haya más empleos».
La diputada del PRO Virginia Cornejo, en tanto, también se sumó a cuestionar el «uso político» de los planes sociales y aseguró que se opondrán si se siguen aumentando los recursos para esta categoría, «como hasta ahora». La legisladora cuestionó que los planes no redundan en beneficios para la sociedad, «como oportunidades de trabajo o que se los incluya en los diferentes estamentos del Estado para los cuales podrían prestar servicios». Cornejo señaló que se deben buscar nuevas estrategias para que los beneficiarios dejen de ser usados políticamente.
La legisladora recordó que el año pasado, cuando se rechazó el presupuesto de 2022, el oficialismo no intentó buscar consensos sino que quiso imponer un aumento de impuestos, sin reflejar la realidad de la economía de la Argentina. «El anterior ministro quería imponer un presupuesto antes de saber qué arreglo se haría con el FMI y cómo se iban a enfrentar las deudas que tienen años y años en el país», señaló, y destacó que ahora se «levanta el dedo acusador diciendo que culpa del otro el país está endeudado».
El diputado MIGUEL NANNI, de la Unión Cívica Radical, también recordó el «presupuesto fallido» y destacó su «falta de sinceramiento», el cual, aseguró, fue rechazado por mostrar «fuertes imprecisiones» en los números. «Tenía una pauta presupuestaria de la inflación del 30%, cuando a meses de terminar el año llega al 100%», destacó.
El radical también pidió un «dólar sincero y no absurdo», y advirtió que esto se debe lograr para «tener competitividad, para que no nos caigamos del mundo y este presupuesto no corra la misma suerte que el anterior».
Zapata también recordó lo lejos que quedaba el presupuesto de las metas reales de inflación que, dijo, «desbordó». En cuanto a cómo proyecta el manejo de la inflación para el año, aseguró que no cree que el oficialismo tenga herramientas: «No están poniendo en práctica las medidas para contener la inflación. Lo que aspira el Gobierno nacional es que se licue el gasto mediante la inflación. Pero la presión fiscal está ahogando a la actividad privada», aseveró el legislador, que relacionó el escenario a un «éxodo de inversores», y por lo cual Zapata no cree que la inflación pueda bajar. Para el diputado, el objetivo del presupuesto debe estar en equilibrar la inflación, cumplir con el FMI e incentivar las inversiones. Aunque aseguró que no mira con optimismo el escenario para cumplir estos tres objetivos.
En cuanto a bajar la presión fiscal para incentivar las inversiones, Virgina Cornejo también se manifestó en la misma sintonía y anticipó que se prevé un «aumento de impuestos y mayores retenciones, con transferencias de partidas». Esto, aseguró, son «superpoderes», por lo que dijo que bregarán para que se realicen las obras que figuran en el presupuesto. «Los salteños estamos cansados de que en cada presupuesto nacional hagan figurar obras que no se hacen», destacó.
Estrada bregará por subsidios federales
El diputado nacional por Salta del Frente de Todos, Emiliano Estrada, aseguró que lo principal que debe tener el Presupuesto es «orden fiscal», y destacó que la discusión radicará en la «mirada política sobre cómo lograrlo». Estrada se refirió al proyecto que se presentó y aseguró que gran parte tiene que ver con las transferencias corrientes y los subsidios a las provincias.
Estrada sostuvo que en la discusión sobre quién hará el mayor esfuerzo para lograr esas metas fiscales, hay que poner el foco en los subsidios que, señaló, deberían ser equitativos y no igualitarios. «Insisto que está mal hecho el recorte de subsidios. Se hizo un recorte por igual, cuando no se puede tratar por igual a provincias en situaciones desiguales», advirtió. En este sentido, explicó que en las provincias «la distribución energética la regula un ente provincial, con lo cual consecuentemente tiene incremento todos los años en función a la inflación. En cambio, en el Amba está Edenor y Edesur y el organismo que los regula no tiene incremento porque no los regula un ente provincial, sino Nación. En ese sentido siempre hay un beneficio para esa región de la Argentina, porque Nación no les incrementa los precios». El diputado también se refirió a los subsidios al transporte: «¿Cuál es la razón para que un porteño siga pagando $25? No hay más razones que políticas», aseguró.
f: El Tribuno