La Secretaría de Energía planea aumentar el impuesto a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC) en los próximos tres meses, monitoreando el impacto de esta medida sobre la inflación. Hasta ahora, se han actualizado los impuestos a los combustibles que se habían prorrogado desde 2021, lo que ha incrementado el precio de las naftas en $140 por litro y generado un impacto de US$3000 millones anuales en mayor recaudación. Eduardo Rodríguez Chirillo, secretario de Energía, anunció que aún quedan por actualizar $160 por litro en naftas y $100 por litro en gasoil.
El gobierno busca evitar un impacto significativo en la inflación, por lo que en mayo decidió postergar la última parte del aumento de impuestos a los combustibles. Sin embargo, las petroleras aumentaron los precios en un 4% debido a la devaluación y la necesidad de recomponer la rentabilidad. En junio, se realizó un desdoblamiento para llevar a cabo la actualización de los gravámenes postergados, resultando en un aumento del 4% en promedio en los precios de la nafta y el gasoil desde el 1° de junio. El ministro de Economía, Luis Caputo, expresó que la inflación de mayo se mantendrá por debajo del 5%, generando optimismo sobre la estabilidad económica.