El ministro de Hidrocarburos de Bolivia, Franklin Molina, respondió a una resolución de la Secretaría de Energía argentina que indicó que el abastecimiento de gas natural desde Bolivia estaría en riesgo a partir de 2024. Molina desmintió esto y aseguró que Bolivia está trabajando en aumentar las reservas gasíferas de la región de Tarija.

Ante esta incertidumbre, Argentina aceleró el proyecto de reversión del Gasoducto del Norte para cubrir la demanda de gas del norte y centro del país con gas de Vaca Muerta. El proyecto cuenta con financiamiento de un préstamo de 540 millones de dólares aprobado por la Corporación Andina de Fomento (CAF) y se espera que empresas petroleras también exporten gas al norte de Chile, Bolivia y Brasil.

Para completar el financiamiento, la Secretaría de Energía instruyó a Cammesa y Enarsa a realizar una «operación de crédito reintegrable». Las obras incluyen la construcción de una nueva línea de 150 kilómetros de extensión entre La Carlota y Tío Pujio en la provincia de Córdoba, que conectará los sistemas troncales de Transportadora de Gas del Norte (TGN) y Transportadora de Gas del Sur (TGS). También está proyectada una segunda etapa del Gasoducto Néstor Kirchner que se licitaría en septiembre para conectar Salliqueló, Buenos Aires, con San Jerónimo, Santa Fe. Se estima que la reversión del Gasoducto del Norte estará operativa entre marzo y abril de 2024.