La brecha de precios entre Argentina y Brasil sigue creciendo, según un análisis de Alberto Cavallo, economista de Harvard e hijo del exministro Domingo Cavallo. A través de un gráfico compartido en la red social X, Cavallo destacó que “Argentina es hoy un 19% más cara que Brasil en dólares para una canasta idéntica de alimentos, combustibles y electrónicos”. Este dato resalta la pérdida de competitividad de los costos argentinos frente a su principal socio comercial.
Mientras Argentina experimenta un fortalecimiento de su moneda, el real brasileño ha atravesado una depreciación significativa este año, alcanzando un máximo histórico de 6,30 por dólar en diciembre antes de estabilizarse en 6,15 tras una intervención del Banco Central de Brasil. Esta dinámica genera preocupación en el sector productivo argentino, que enfrenta desafíos cada vez mayores para competir en el mercado regional.
La consultora Sekoia señala que el tipo de cambio real en Argentina está cerca de los niveles registrados en 1999-2001 y 2015, períodos que antecedieron crisis económicas importantes. Según su informe, el país se encuentra apenas un 10% por debajo de esos valores críticos, planteando dudas sobre si el desenlace esta vez será distinto.
De cara al futuro, el gobierno de Javier Milei enfrenta decisiones clave. Las opciones incluyen mantener el régimen cambiario actual, caracterizado por controles estrictos de capital, o avanzar hacia un modelo más flexible que podría brindar mayor estabilidad a largo plazo, aunque con costos políticos en el corto plazo.
Con una inflación en mínimos históricos, el desafío radica en cómo consolidar los avances recientes sin comprometer la estabilidad estructural del país. La discusión sobre la competitividad y el futuro económico de Argentina se torna cada vez más urgente.