La estación meteorológica del Aeropuerto Internacional de Asaluyeh, Irán, registró una temperatura de más de 66 grados Celsius, acercándose al límite soportable para los seres humanos, que se estima en 71 grados. China también registró temperaturas récord de casi 52 grados, y el Valle de la Muerte en Estados Unidos alcanzó los 53 grados.
Expertos advierten que estas condiciones climáticas abruman la capacidad del cuerpo humano para regular su temperatura interna. El calor extremo es especialmente peligroso para personas mayores y con problemas cardíacos, ya que la sudoración solo es efectiva si se evapora, lo que puede dejar de ocurrir a partir de los 31 a 35 grados Celsius. Estas temperaturas extremas están relacionadas con un aumento del calor global debido a factores como el fenómeno de El Niño y el calentamiento por gases de efecto invernadero.