La mujer declaró que tuvo un ataque de furia: “Se me soltó la cadena” y que no midió las consecuencias de sus actos.

Una terrible escena de violencia se vivió en una escuela de Río Negro, cuando en medio de una clase, una mujer muy alterada entró al aula y agredió a un alumno, acusándolo de hacerle bullying a su hijo.

Se trata de Romina Narváez, quien tras el hecho, reconoció que tuvo una “reacción inadecuada”, a lo que agregó que “se le saltó la cadena”, en declaraciones al medio televisivo TN.

El aberrante hecho, tuvo lugar dentro de un aula de la escuela CEM 1 de General Roca, en la sureña provincia, en donde la mujer asegura tuvo que llegar a este extremo, porque la institución educativa no intervino ante las reiteradas denuncias de violencia y agresiones para con su hijo, por parte de algunos de sus propios compañeros.

“Reclamé 10 mil millones de veces que el bullying contra mi hijo se frenara. Eso viene de hace muchos meses”, manifestó Narváez, mientras que indicó que “muchas veces me presenté en la escuela a pedir que solucionaran la situación, a pedir reuniones con los padres de estos chicos”, pero lamentablemente no recibió ninguna respuesta.

Según el relato de la madre, ese mismo día se presentó en la institución para hablar con el director pero este nunca la recibió, por lo que enfurecida por la desatención de los directivos de la escuela, decidió entrar al aula y advertirle al estudiante que dejara de molestar a su hijo.

En tanto, Romina, denunció que las autoridades de la escuela la maltrataron en varias oportunidades, ante su reclamo por lo que ocurría puertas adentro, e incluso el director “le echó la culpa a mi hijo” del acoso que sufría, detalló.

“La escuela no pudo controlar la situación, me sobrepasó y terminé increpando al alumno en el curso, haciendo justicia por mano propia, defendiendo a mi hijo”, relató la compungida madre.

Al respecto, Narváez sostuvo que “salió a pedir perdón de corazón” tanto al chico que agredió como a su familia, aunque recalcó que a su hijo “nunca le pidieron disculpas”, por los malos tratos y amenazas recibidas dentro de la escuela.

Por su parte, la madre del adolescente agredido denunció penalmente a Narvaéz y dio una versión diferente de los hechos: “Este chico ingresó a mitad de año, ya lo habían echado de otros dos colegios. Ni siquiera es compañero de mi hijo, es dos años más chico. Vive peleando. Con mi hijo se peleó hace dos semanas en la calle, y después lo amenazó llevando cuchillos al recreo”, explicó la mujer.

f:Nexofin