La legisladora porteña Graciela Ocaña, de Confianza Pública, manifestó su frustración por el fracaso en la aprobación del proyecto de Ficha Limpia en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, aunque destacó los avances logrados en el Presupuesto 2025. Según Ocaña, se consiguió una planificación presupuestaria que prioriza la seguridad, la salud y la educación, sectores fundamentales para los ciudadanos.

En declaraciones a Radio Rivadavia, Ocaña resaltó una medida que beneficiará a los jubilados porteños. «Todos los jubilados que tengan una propiedad única en CABA, cuyo valor no exceda los 40 millones de pesos, y que perciban hasta cuatro jubilaciones mínimas, estarán exentos del ABL o recibirán un descuento de hasta el 25%».

El punto central de su mensaje fue el proyecto de Ficha Limpia, que no logró ser tratado por un solo voto. «Por un voto no alcanzamos a tratar Ficha Limpia en la Legislatura Porteña. Es una iniciativa que impediría que cualquier dirigente con condena en la Cámara de Casación Penal pueda postularse a un cargo público», explicó.

Ocaña enfatizó el fuerte respaldo ciudadano detrás de esta propuesta, que cuenta con 451.000 firmas de vecinos porteños. «Es una demanda de la sociedad civil, y vamos a insistir para que se apruebe en el futuro. Necesitamos que los legisladores se comprometan con esta ley para evitar que se repita lo ocurrido ayer, donde faltó un voto», subrayó.

La legisladora apuntó directamente contra Unión por la Patria y la izquierda por bloquear el avance del proyecto. «Los que votaron en contra son 18 legisladores de Unión por la Patria y 3 de la izquierda. Lo de la izquierda es especialmente llamativo: si alguien con antecedentes penales no puede trabajar en CABA, ¿por qué un político con doble condena puede representar a los vecinos?», cuestionó.

Para Ocaña, Ficha Limpia es esencial para renovar la política y recuperar la confianza de los ciudadanos. «Debemos excluir a los corruptos de la política. Permitir que personas con antecedentes penales ocupen cargos públicos envía un mensaje equivocado a la sociedad», concluyó con firmeza.