España buscará el respaldo de Francia para reactivar el estancado acuerdo comercial entre la Unión Europea y Mercosur, apelando a la ambición de Emmanuel Macron de convertir a la UE en un «tercer polo» en los asuntos mundiales. El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ve una oportunidad para revivir el tratado durante la próxima presidencia española de la UE, debido a sus relaciones cercanas con los presidentes de Brasil y Argentina. Sánchez planea anunciar los próximos pasos en una cumbre regional al comienzo de su presidencia europea.
Macron ha abogado por la «autonomía estratégica» de la UE y ha mencionado la posibilidad de convertirse en un «tercer polo» junto a Estados Unidos y China. Sánchez intentará convencerlo de que el acuerdo con Mercosur ayudaría a la UE a ampliar sus alianzas con otros países democráticos y a reequilibrar el mapa geopolítico.
El acuerdo comercial entre la UE y Mercosur fue acordado en principio en 2019, pero aún se está negociando una «carta complementaria» que requiere compromisos adicionales sobre cambio climático y biodiversidad. Ambos bloques tienen objetivos económicos diferentes, con la UE buscando mayor acceso a productos manufacturados y Mercosur buscando aumentar sus exportaciones agrícolas y minerales.
El impulso para el acuerdo se había debilitado bajo la administración de Jair Bolsonaro en Brasil, quien compartía la desconfianza de Donald Trump hacia los acuerdos de libre comercio. Sin embargo, su sucesor, Lula da Silva, ha participado en la reactivación del acuerdo y mantiene una estrecha relación con Sánchez.
Aunque el futuro político de Sánchez está en duda debido a las próximas elecciones generales anticipadas, el Partido Popular español apoya el acuerdo con Mercosur y no se esperan cambios significativos en la política si Sánchez no es reelegido presidente. Por su parte, el Gobierno de Argentina ha expresado preocupaciones sobre el desequilibrio del acuerdo y está buscando corregirlos.