El presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció el miércoles la ruptura de relaciones diplomáticas con Israel debido a sus acciones en Gaza. Petro había criticado previamente al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y expresó su deseo de unirse al caso de Sudáfrica que acusa a Tel Aviv de genocidio ante la Corte Internacional de Justicia.

En un acto conmemorativo por el Día Internacional de los Trabajadores en Bogotá, Petro declaró: «El Gobierno del cambio, el presidente de la República informa que mañana se romperán las relaciones diplomáticas con el Estado de Israel (…) por tener un Gobierno, por tener un presidente genocida». Afirmó que los países no pueden permanecer pasivos ante los acontecimientos en Gaza.

El ministro de Asuntos Exteriores israelí, Israel Katz, acusó a Petro de ser «antisemita y lleno de odio», y consideró que la medida era una recompensa para el grupo armado Hamás, que lideró un ataque mortal contra bases y comunidades militares israelíes el año pasado.

Colombia se une así a Bolivia, que comenzó la ruptura de relaciones con Israel en octubre pasado. Otros países latinoamericanos, como Chile y Honduras, también retiraron a sus embajadores de Israel. Mientras tanto, el canciller alemán, Olaf Scholz, y Netanyahu discutieron el conflicto entre Israel y Hamás, incluida la posibilidad de un alto el fuego, así como mejoras en la ayuda humanitaria para la población de la Franja de Gaza, en una llamada telefónica reciente.