A pocos días de las elecciones primarias, el Gobierno ha decidido aumentar el salario mínimo vital y móvil, que alcanzó los $112,500 en agosto y se espera que llegue a $118,000 en septiembre. Esto ha resultado en el pago de suplementos a jubilados que quedaron por debajo de esos valores.

El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció durante el fin de semana desde un evento organizado por el Movimiento Evita, la CCC y Barrios de Pie en Ferro, que el Gobierno se compromete a recomponer los salarios, especialmente para trabajadores informales que no tienen derechos como obra social, seguro de riesgo de trabajo y aportes jubilatorios. Massa expresó la intención de establecer un piso salarial mínimo para los trabajadores en actividad, además del salario mínimo vital y móvil, pero no se dispusieron detalles sobre montos o métodos de pago.

Gerardo Martínez, titular de la UOCRA, también habló en la misma línea, destacando la necesidad de actualizar los salarios formales que están por debajo de la línea de pobreza sin afectar las instancias de las paritarias (negociaciones salariales).

El próximo mes, se espera aplicar el tercer aumento anual de acuerdo con la Ley de Movilidad Previsional, lo que representaría aproximadamente un 23% considerando la inflación proyectada y los aumentos salariales. Esto llevaría el haber mínimo de jubilación cerca de los $87,500. Además, se tendrá en cuenta el reajuste necesario debido al aumento previsto en el salario mínimo vital y móvil para septiembre.