La bronca entre el Gallego y el Cabezón habría nacido en un amistoso que los tuvo a ambos de protagonistas en 2002.

Rubén Darío Insúa salió a responderle con dureza a Marcelo Tinelli, tras la confirmación de que el ex presidente de San Lorenzo le realizó una demanda por daños y perjuicios. En una conferencia cruda, no llamó nunca por su nombre al Cabezón, lo llamó “cobarde” y lo acusó de “tomar represalias” contra sus dos hijos por un problema personal que lleva muchísimo tiempo. Pero, ¿cómo nació el conflicto?

La bronca entre el Gallego y Tinelli habría nacido en un partido amistoso que se jugó en 2002 entre San Lorenzo y Deportivo Español en el Nuevo Gasómetro. La cita servía de excusa para presentar a los refuerzos para la nueva temporada y también como presentación para el propio Insúa, quien por entonces regresaba a Boedo como técnico luego de su exitoso paso por el club como jugador.

No obstante, la particularidad de aquel partido fue que uno de los jugadores que saltaron al terreno de juego fue nada menos que Tinelli. Muchos años antes de meterse en la política del club era uno de sus hinchas más reconocidos y en aquel amistoso cumplía el sueño del pibe. Estaban todas las cámaras de su programa de TV, furor en ese momento, y MT ganó bastante protagonismo.

Al principio el club le entregó una plaqueta a Tinelli en forma de homenaje y lo nombró socio honorario. Luego, estuvo todo el primer tiempo sentado en el banco de suplentes junto a su hijo Francisco. Insúa decidió mandarlo a la cancha a los 22 minutos del complemento, en reemplazó de Mariano Herrón, pero 14′ más tarde lo sacó para que ingresara Astudillo. Y ésto no le habría caído nada bien al Cabezón…

Consultado por el tema, Insúa no ahondó en detalles y apenas esgrimió: «No importa el origen del problema. Él se enojó conmigo por un episodio y me consta. Sé lo que piensa él de mí y él sabe lo que pienso yo de él. No le di demasiada importancia que él esté enojado conmigo. Sí, a partir de que se metió con gente que yo amo, voy a estar en la vereda de enfrente».

El Ciclón ganó aquel encuentro amistoso por 5 a 1 con goles del Beto Acosta (2), Sebastián Saja, de penal, Carlos Cordone y Lucas Pusineri. El equipo completo fue: Saja; Paredes, Blanco, Esquivel, Morel Rodriguez; Herrón, Michelini, Chatruc, Romagnoli; Acosta y Frutos.

Más allá de las versiones del origen, el problema se recrudeció en 2015. ¿El motivo? El Gallego lo culpa por haber dejado libre a su hijo Robertino, quien en 2015 integró la Reserva que se consagró campeona con el Chimi Ávila como goleador.

f: Olé