Este martes, el Ministerio de Seguridad de la Nación dio a conocer un nuevo protocolo de gestión destinado a presos de alto riesgo. Durante un evento llevado a cabo en el Complejo Penitenciario Federal I en Ezeiza, Patricia Bullrich, titular de la cartera, presentó el innovador sistema diseñado para las cárceles federales. El objetivo principal es prevenir que líderes de organizaciones criminales continúen sus operaciones desde la prisión.
Para lograr esto, se han implementado diversas medidas, entre las que se destacan la introducción de tecnologías avanzadas como escáneres de rayos X para la entrada de personas al sector, sensores infrarrojos para detectar movimientos, detectores de metales, monitoreo las 24 horas del día mediante reconocimiento facial, control de llamadas telefónicas y la incorporación de sistemas de inteligencia artificial para el análisis de datos.
Estos controles se aplicarán de manera estricta a aproximadamente 150 presos, en su mayoría alojados en las unidades de categoría “A” del Servicio Penitenciario Federal (SPF), como el Complejo Penitenciario Federal II de Marcos Paz, la Unidad 6 de Rawson, y el mencionado penal de Ezeiza. Las autoridades resaltaron que estos reclusos tienen la capacidad de escapar, dirigir actividades criminales desde la cárcel, intimidar o corromper a funcionarios penitenciarios, obstaculizar investigaciones judiciales y coaccionar a otros internos para lograr objetivos criminales.
