El Gobierno ha decidido postergar tres aumentos previstos, incluyendo el gas, la luz y el impuesto a los combustibles, para mantener la baja de la inflación. En el caso del gas y la luz, aún no hay novedades sobre su aplicación. Respecto al impuesto a los combustibles, originalmente programado para mayo, se ha pospuesto para junio, con una revisión también prevista para julio. Las petroleras, que han experimentado un retraso en sus precios desde enero, han aplicado recientemente un aumento del 4% promedio para buscar una recomposición, ante la depreciación del peso y la necesidad de alcanzar valores internacionales.

Además, se ha diferido el aumento en los boletos de colectivos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), mientras que el aumento del tren sí se ha implementado. Aunque la inflación muestra una desaceleración debido a la recesión económica, se espera que el índice de precios al consumidor (IPC) para abril oscile entre el 8,7% y el 5%, con diferentes proyecciones de consultoras privadas. A pesar de la variabilidad de las proyecciones, se observa una tendencia a la baja en la inflación, aunque con algunas fluctuaciones asociadas principalmente a los aumentos en los precios regulados.