El cohete Starship, diseñado por SpaceX en colaboración con la NASA para avanzar en las pruebas necesarias que permite enviar humanos a la Luna y Marte, sufrió una explosión dos minutos después de su despegue.

El proyecto liderado por Elon Musk se encuentra en fase de prueba y se trata de uno de los cohetes más poderosos jamás fabricados.

El lanzamiento estaba originalmente programado para el lunes, pero fue abortado 10 minutos antes debido a problemas de presurización en la nave. La prueba de hoy fue la segunda en este proceso de exploración a Marte y la Luna.

El cohete Starship contaba con una altura de 50 metros, estaba equipada para transportar una tripulación completa y estaba colocada sobre un cohete llamado Super Heavy, que medía 230 metros de altura. La NASA había seleccionado el Starship para transportar astronautas en los próximos dos años. El modelo podía transportar hasta 150 toneladas métricas completamente reutilizables y 250 toneladas sustituibles. Además, estaba equipado con seis motores propios.

Elon Musk comentó en su cuenta de Twitter sobre la explosión del cohete Starship: «Marte, allá vamos, solo necesitábamos un poco más de presión en el sistema de combustible del motor 2. No hay problema, ¡10 metros más tarde o más temprano! La nave todavía parece haber sido estructuralmente sólida, ¡lo que está progresando! «, indicando que se trata de un contratiempo en el proceso de prueba y que seguirán trabajando para mejorar la nave espacial.

Cabe destacar que el costo exacto del cohete Starship y los lanzamientos no ha sido revelado por SpaceX.

Sin embargo, se sabe que la empresa tiene como objetivo reducir los costos de los viajes espaciales, y ha trabajado en la reutilización de cohetes y naves para abaratar los precios. En cualquier caso, el desarrollo de la nave y los lanzamientos son costosos y representan una inversión importante para la empresa de Elon Musk.

f:El Cronista