La pasión azulgrana no tiene fronteras y del otro lado del Océano Atlántico está el mejor ejemplo
Los catalanes que concurren no entienden nada y quedan asombrados. Banderas en todos los rincones del estadio, canciones con picardía argentina, papelitos cuando el equipo sale a la cancha. Toda una adaptación para un nuevo fenómeno: San Lorenzo de Catalunya (escrito como se pronuncia la “ñ” en esta región) acaba de comenzar a jugar el torneo de fútbol de la cuarta división de la Federación Catalana –como estar en la novena división- y oficia de local en “El Gasómetro de Badalona”, el pequeño estadio que pudo encontrar luego de un enorme esfuerzo que incluyó recorrer toda la ciudad y juntar el dinero necesario para afrontar un duro campeonato, del que van tres fechas.
De cómo se convirtió en una de las tantas peñas de clubes argentinos al camino de convertirse en una filial legal del San Lorenzo argentino. Qué funciones cumple la agrupación, que desde 2023 comenzaría a participar también en el torneo femenino. En diálogo con Infobae, el presidente de la peña “Cuervos de Catalunya” y del club, Paolo Renard Bazzaco, dieron más detalles al respecto.
– ¿Cómo fue comenzar a jugar en la cuarta división catalana?
– Nosotros integramos el grupo 17 de la cuarta catalana, que es la categoría en la que se empieza, la última de todas. Se puede ir a la tercera comprando la plaza, si queda libre pero no nos interesó. Nosotros queríamos empezar desde abajo. Venimos con la peña desde 2007 y ahí arrancamos con los torneos de peñas que eran torneos relámpago donde jugaban River, Boca, Rosario Central, Newell’s Old Boys –que eran las primeras- y con el tiempo se fueron creando peñas nuevas. En 2014, para el Mundial de Brasil, que nos juntamos todos a verlo con la filial argentina, fue una locura. Llegamos a ser unos 1200 en el local “La Oveja Negra”, y allí se generaron peñas nuevas: Independiente, Godoy Cruz, Vélez. Esos torneos relámpago eran de un día, de peñas y filiales y encima se da la casualidad de que venimos ganando casi siempre y ya hace unos años hicimos la liga de peñas y filiales, o sea que ya no es un torneo relámpago sino una liga y se juega cada jueves. Por ahora se hicieron cuatro y las cuatro las ganamos.
– ¿Eso fue lo que los alentó?
– Lo rescatable es que todos los que jugamos en el equipo de las peñas, somos todos “cuervos”. Como veíamos que ganábamos todos los torneos y hasta fuimos a jugar un Nacional a Cádiz, decidimos federarnos, aunque me daba un poco de miedo. Eso significa que ya estás dentro de la Real Federación Española de Fútbol, dado de alta como club, y como acá se divide todo por comunidad autónoma y estamos en Cataluña, formamos parte de la Federación Catalana y estamos en la categoría más baja. El orden es hasta la Primera Catalana, de allí a Tercera Regional, hasta Primera Regional, Segunda división y Primera división. Eso está lejos pero cuando uno sueña, lo hace en grande (risas).
– ¿Cómo se acercó a la peña? ¿Cómo es su historia personal?
– Hice la primaria en el barrio de Boedo, luego me fui a Liniers con mi familia. En 1990 emigramos a Barcelona hasta 1994, luego volvimos a vivir en Merlo y en 2002 ya regresé a Barcelona con mi familia, así que llevo veinte años en esta etapa. Me dedico al rubro inmobiliario.
San Lorenzo de Catalunya, nació como peña y hoy triunfa en la cuarta división de Cataluña
– ¿Los apoya en algo San Lorenzo desde Buenos Aires?
– Sí, tenemos un contacto muy estrecho con la dirigencia actual y también con la oposición. Ellos han venido a un encuentro de peñas porque en Europa tenemos varias, la de Madrid, las de Italia, Francia, Valencia, Baleares, Canarias, etc y cada año hacemos un encuentro y vamos rotando la sede: en Barcelona, en Israel y hasta ahora, la dirigencia siempre ha venido y nos ha ayudado y también ayudó al equipo, dándonos la primera y la segunda equipación para jugar, todo gracias a Miguel Mastrosimone, secretario general del club. Cuando estuvo el intento de federarnos yo les envié un PDF con un proyecto muy ambicioso, interesante, y a ellos les gustó la idea y nos pidieron una reunión vía zoom y ya se planteó que fuéramos no una peña sino una filial, que es otra cosa, una parte extendida del club, pero con todos los líos burocráticos de la Argentina y de San Lorenzo, querían que todo fuese legal con abogados, mientras tanto estamos viendo de legalizar y ser la única filial de San Lorenzo en el exterior.
– Además de la burocracia, eso seguramente implicará más gastos. Es un salto de calidad…
– Desde ya. Implica mucho dinero, que antes no era tanto porque sólo pagabas el torneo que jugabas. Ahora hay más exigencias: una cancha, lo que implicó recorrer Barcelona buscando una porque ahora la ciudad está copada de canchas tomadas por equipos, y más ahora con el auge del fútbol femenino. Conseguimos una en Badalona – a 10 kilómetros de Barceona-, en el campo de Pere Gol, que bautizamos como “El Gasómetro de Badalona” para lo que tuvimos que pagar 2600 euros anuales, lo que es un dinero. Lo conseguimos con actividades como asados, está saliendo dentro de poco el carnet de socio con una cuota baja, anual, que nos sirve para aquel que se quiera sumar, subastamos camisetas como las que el club nos mandó de Sebastián Torrico y Néstor Ortigoza entre todas las peñas de Europa y se vendió a casi 2000 euros. Cada vez que jugamos de locales hay que pagar a los árbitros otros 120 euros. La ficha de cada jugador son otros 120 euros más, comprar pelotas, pecheras.
– ¿Cómo es la actividad del equipo?
– Tenemos una dupla técnica, Joaquín “Pipa” y Lautaro, dos chicos argentinos que dirigen acá desde hace tiempo, Segunda y Primera catalana. No tenían intención de dirigir Cuarta catalana pero vieron el proyecto y les gustó muchísimo. Son hinchas de Gimnasia y muy buenos. Nos entrenamos los martes y jueves y jugamos los sábados, y de visitantes, te puede tocar sábado o domingo dependiendo del día que tenga programado el equipo para jugar.
– ¿Y cómo es el ambiente?
– Jugamos contra diferentes ciudades, pueblos o barrios. Por ejemplo, el barrio de Collblanc Torrassa, el de la próxima fecha, es un barrio al que el ayuntamiento le da su cancha y tiene su club, con categorías inferiores. De los 27 que somos, sumando a los DT, 26 son argentinos menos un chico que se vino a probar, que es amigo de una chica de la peña, que es hondureño, Marco Antonio. Le pusimos “El emperador” (risas). Van tres partidos. Perdimos los dos primeros y fue algo raro porque no estábamos acostumbrados a perder. No nos confiamos, pero la categoría cambia. Y en el último fin de semana pudimos ganar 3-2. Una cosa de color es que en el segundo partido nos tocó un árbitro uruguayo. Y lo primeo que nos dijo antes de empezar es “miren que yo a ustedes los argentinos los conozco y no quiero que me hablen porque a la primera que lo hagan, los echo”. Así arrancó (risas). Nos sacó 30 amarillas, nos echó a un jugador… tremendo. En el tercer partido, la gente nos decía “che, nos cuentan que ustedes son de un club de la Argentina que vinieron a jugar acá”, se hacen cada película.
Paolo Renard Bazzaco, el presidente del club San Lorenzo de Catalunya y de la peña “Cuervos de Catalunya”
– ¿Y la hinchada, tan popular y con tanta impronta en la Argentina?
– Y sí, otra cosa que gusta es la hinchada. Nosotros solemos ser 250 pero rondaremos en los 300-350 socios en la peña y para los partidos, depende de cuál sea, cuándo sea. Para ver los partidos de la Argentina por TV, jugaban San Lorenzo-Huracán y éramos unos 70 en el bar. Acá en Badalona éramos unos cuarenta hinchas, con pirotecnia, bengalas azulgranas, y la gente no lo podía creer, gente que se suma, pregunta y al vernos ya empieza a venir. Eso nos pasa también por la calle cuando venimos a ver los partidos porque nosotros hacemos como si fuera en la cancha, con cantitos, alentamos moviendo los brazos y la gente entra y pregunta y se va haciendo de San Lorenzo por la movida.
– ¿Qué recepción tienen de la gente local?
– Se acercan muchos hinchas del Barcelona. Por los colores, y el que sabe de historia. Tenemos hinchas catalanes que vienen seguido y son un cuervo más que lo mira, lo sigue. Un muchacho, Juanjo, que viene a la peña y es catalán, hincha del Barcelona y sigue a San Lorenzo desde 1995 por llevar la camiseta azulgrana, cuando San Lorenzo vino a jugar la Copa Joan Gamper en ese año, se hizo fanático, y así hay un montón, gente que viaja a Buenos Aires, lo va a ver, se hace hincha. Después, hay peñas del Barcelona hermanadas con nosotros porque les interesa mucho los colores. Y está el factor histórico: los españoles que viajaban a la Argentina se hacían de San Lorenzo o de Independiente casi todos, como tal vez el italiano tiraba más por Boca.
– La hinchada de San Lorenzo siempre fue reconocida por la creatividad. ¿Hay alguna canción especial que hayan creado en Cataluña?
– No tenemos canciones específicas de acá porque tenemos tantas de allá. Hay alguno de los chicos que a veces y en broma le cambian la letra a las canciones y le agregan lo del Gasómetro de Badalona, los cuervos de Cataluña, cosas así.
– Me decía que ahora están pensando en inscribir al equipo femenino también en la Federación Catalana.
– Sí, tenemos muchas mujeres integrantes de la peña, tan o más fanáticas que los varones. Y muchas juegan al fútbol. Se hicieron cinco torneos de peñas femeninas y ganamos cuatro y el quinto perdimos la final por penales. Las chicas juegan todas la semanas. La pasada le ganaron 2-0 a Rosario Central por la peña femenina, antes lo hicieron por 7-2 a Independiente. Están enganchadísimas, y como hay un auge muy grande del fútbol femenino, la idea es federarlas también en 2023. También soñamos con tener divisiones inferiores, con categorías más chiquitas y que los mismos jugadores sean DT y se vayan ensamblando todos. Es un laburo constante. Mil cosas, como hablar con los medios.
El equipo femenino de San Lorenzo de Catalunya
– Se convirtió en un dirigente
– A menor escala… o más. Porque la pasión de hincha que uno tiene te lleva todo el día y lo hago con mucho amor y muchas ganas pero hay días que mi mujer me dice “otra vez con San Lorenzo, con la peña”. Es hincha, su familia ya lo era y su hermano es de la peña, pero no es fanática como yo. El estar 24 horas con San Lorenzo…entrás a mi casa y tenés la camiseta titular, la suplente, la de las chicas la bandera del palo, la bandera grande, la bandera que hicimos en homenaje a tal… Le agradezco que me banca mucho. Y no quiero dejar de mencionar a José Cajaraville, vicepresidente de la peña, y a Facundo Pérez, vicepresidente del club, y a Ezequiel Vargas, vicepresidente segundo.
– En la Argentina, la gente de San Lorenzo está movilizada por la vuelta a Boedo, con permanentes marchas. ¿Ustedes las replican en Barcelona?
– Muchas veces replicamos sus marchas acá. El mismo día que se hacen las marchas allá, nos juntamos unos cuarenta, hacemos fotos y apoyamos el sentir de la gente de allá y lo que más esperamos ahora es que se haga realidad el tema de la vuelta a Boedo, algo que para el hincha de San Lorenzo es fundamental y hasta que no esté el estadio seguiremos laburando.
– ¿Suelen venir ex jugadores?
– Antes de empezar el torneo de la Cuarta catalana hubo una cena con todos los jugadores y vino Pablo Zabaleta, que vive acá y fue campeón con San Lorenzo. También vinieron Bernardo Romeo, Alberto Acosta y el uruguayo Luis Malvárez, de “Los Camboyanos”. También intentamos contactar a Viggo Mortensen que vive en Madrid, tiene casa con la mujer, que es catalana, pero no vino todavía. Gonzalo Rodríguez fue a la peña de Valencia. En general, cuando hay un ex jugador que anda por la zona, suele venir.
– ¿Tienen, además, una sede donde se reúnen?
– No hay una sede. Cuando hacemos asado, tenemos un lugar, merenderos donde están las parrillas. La comisión directiva se reúne en un bar de la calle Paris 180. Cuando se trata del equipo, lo decidimos en la cancha. Los martes, tenemos reunión de redes sociales del equipo femenino (hay redes de la peña y de San Lorenzo de Catalunya de Cataluña). Tener una sede implica pagar un alquilar. Lo pensamos muchas veces para tener todo, escudo, banderines, pero hay que pagar luz, gas, agua. Si es en el centro, no podemos gritar, porque la gente se queja del ruido, y si es alejado, no vienen, así que por ahora no vale la pena por el momento.
– ¿Cómo es eso del ruido?
– Cuando juega San Lorenzo en la Argentina lo vivimos con tanta pasión, cantamos, y ciertos bares te aguantan hasta que hay una denuncia de gritos. Estuvimos tres años de lugar en lugar pero ahora desde hace un año, Miguelo, que es de nuestra peña, abrió este bar y estamos cómodos. Estamos contentos. El problema es por las cinco horas de diferencia con la Argentina, entonces a veces, cuando San Lorenzo juega a las 21 de allá, acá son las dos de la mañana Y nosotros vamos a cualquier horario a verlo. Pero si gritamos, despertamos a los vecinos y a veces eso nos generó algunas quejas.
El escudo de San Lorenzo de Catalunya
– ¿Cómo se compone la peña?
– Hay de todo. Mucha gente que vino preparada, otros trabajan de lo que pueden, otros vienen a hacer un máster. Hay gente joven, de mediana edad, algunos mayores, el que viene de vacaciones y pasa los tres meses de verano y viene a ver los partidos con nosotros. Contra Huracán, el otro día, éramos setenta personas, paramos el semáforo, sacamos foto, cantamos todo el partido y la gente queda muy contenta y es muy lindo. También la peña está pensada para que todo “cuervo” que se acerca y viene a otra cultura, desde lejos, que no tiene su vivienda, tu familia, sus amigos, y llegar y encontrarte con un grupo de 200-300 personas que te acogen es tremendo, que te ayudan en el tema habitacional, laboral. Hay un grupo que va a bailar, o a jugar al paddle. Operamos como aglutinadores para que no se sientan solos. De vacaciones es muy lindo pero el día a día cuesta. Todos dicen “qué lindo es estar en Europa” pero no todos pueden por el desarraigo. Ese es otro sentido de la peña.
– Me decía que en los torneos de peñas juegan contra otros equipos argentinos. ¿Cómo es la convivencia, fuera del país, con otras hinchadas?
– La convivencia es correcta. Al estar lejos, uno va aprendiendo y te das cuenta que eso de ese odio, esa pelea con las demás hinchadas es en vano. Nunca hay pelea en los torneos de peñas y eso que llevamos las banderas, los bombos, nos cantamos unas a otras pero hasta ahí. El folklore del fútbol sí, pero no llegar a la violencia. El 12 de octubre organizamos con la APIFAV (Asociación de Peñas y Filiales Argentinas de Barcelona) un torneo de naciones con diez países y entre ellos, Cataluña. Este año seré el DT de la selección argentina y cité a dos jugadores de cada peña para que haya un equilibrio. La relación es muy buena. Podemos juntar a la gente acá sabiendo que allá hay tanta violencia y aún sin hinchas visitantes, lo que es una locura. Recuerdo que lo que pasó ahora con el hincha de Gimnasia nos pasó a nosotros con Ramón Aramayo hace una década en un San Lorenzo-Vélez, que lo mató la Policía y tenía esposa e hijos. Comprendo que hay mucha violencia allá, perol a Policía se pasa.
f: Infobae