El presidente Javier Milei ha descartado la posibilidad de avanzar con la dolarización en el transcurso de este año. Durante una entrevista concedida al periodista Iván Schargrodsky para su boletín «Off The Record» en Cenital, el mandatario rechazó las especulaciones que sugerían que había planteado al Fondo Monetario Internacional la idea de modificar el sistema monetario argentino en el corto plazo.
Desde el avión que lo llevaba a Israel, donde se encuentra actualmente en un gesto de fuerte apoyo al gobierno de Netanyahu después del ataque terrorista de Hamas ocurrido el 7 de octubre del año pasado, el presidente afirmó: «El tema de la dolarización no está en la agenda con el FMI».
A pesar de esto, Milei señaló que la libre competencia de monedas sigue siendo parte de su plan económico, considerándola como el último paso en el proceso que comenzó con el saneamiento del Banco Central. Detalló que esta reforma implicaría la creación de una banca anticorridas, y una vez implementada, se podría pasar a un sistema de banca libre donde el Banco Central podría ser liquidado en cualquier moneda, aunque lo más sencillo sería hacerlo en dólares.
Además, el presidente también explicó cómo podría operar esta dolarización en la economía cotidiana de los argentinos, mencionando que las competencias de monedas no necesariamente implican que los individuos utilicen el dólar estadounidense. Propuso que, por ejemplo, un petrolero podría usar el WTI, alguien del sector gasífero podría usar el BTU, y en el sector agrícola, podría preferir la Soja Chicago. Esta diversificación de monedas formaría una canasta donde los ponderadores son determinados libremente por los individuos, lo que, según Milei, neutralizaría los efectos de la política monetaria de un país en particular.
