El 12 de junio se conmemora en Argentina el Día Nacional del Arquero de Fútbol, en honor al legendario Amadeo Raúl Carrizo, nacido en Rufino, Santa Fe, en 1926. Su legado revolucionó el puesto de arquero con su estilo innovador y arriesgado, dejando una huella imborrable en River Plate y en la historia del fútbol mundial. Carrizo, quien debutó en River a los 19 años, jugó un total de 551 partidos en el club durante 24 años, ganando siete títulos y la admiración de todo el mundo futbolístico.
Además de su longevidad en el deporte, Carrizo fue pionero en técnicas como salir del área para jugar en defensa y usar guantes, marcando un hito en la historia del arco. Reconocido como el mejor portero sudamericano del siglo XX por la IFFHS, su legado trasciende el campo de juego y se celebra cada año en Argentina en honor a su contribución al fútbol.