Leopoldo «Pitito» Martín Martínez, señalado como posible sucesor del asesinado jefe de la barrabrava de Rosario Central, fue detenido en su domicilio del barrio Villa Manuelita, al sur de Rosario, en un operativo llevado a cabo por la Agencia de Investigación Criminal (AIC).

Un clima tenso en la barra canalla
El pasado noviembre fue especialmente convulso para la hinchada de Rosario Central. El asesinato de «Pillín» Bracamonte, principal líder de la barrabrava, durante un proceso judicial por lavado de dinero, marcó un antes y un después. El crimen ocurrió tras la derrota del Canalla ante San Lorenzo en el Gigante de Arroyito, y también resultó en la muerte de su segundo al mando, «Rana» Atardo.

El operativo en Villa Manuelita
En un allanamiento encabezado por la Tropa de Operaciones Especiales (TOE), ordenado por el fiscal Alejandro Ferlazzo, Martínez fue arrestado. Durante el procedimiento, se incautaron bolsas de transporte de caudales, municiones calibres 20 y 22 mm, ropa vinculada al club y a la Uocra, y un arma calibre .380 mm con la numeración limada.

Aunque fue imputado por la tenencia del arma y los cartuchos, no se le atribuyeron cargos relacionados con el caso de lavado de dinero de Bracamonte. Además, Martínez enfrenta una imputación por el homicidio del exlíder de la barra. La jueza Silvia Castelli dictó prisión preventiva efectiva por 60 días.

Conflictos en el sur de Rosario
Las rivalidades entre las barrabravas de Rosario Central y Newell’s Old Boys han avivado la violencia en la zona sur de la ciudad. Las casas de Bracamonte, Atardo y Martínez han sido blanco de balaceras recientes, incluyendo un ataque el 30 de noviembre contra el domicilio de Martínez, previo al partido entre Central y Racing. Aunque no hubo heridos, se encontraron vainas servidas en el lugar.

Una lucha nacional contra el crimen organizado
El subsecretario de Intervención Federal, Federico Angelini, destacó que el gobierno nacional, liderado por Javier Milei y con Patricia Bullrich como ministra de Seguridad, está implementando un plan para combatir el crimen organizado y el lavado de activos.

Según Angelini, las acciones federales en zonas críticas han reducido los delitos en un 70%. Subrayó la importancia de atacar las fuentes de financiamiento de las organizaciones criminales, afirmando que la seguridad nacional es una prioridad en la agenda pública y del gobierno actual.

Este caso refleja la complejidad del entramado delictivo vinculado al fútbol y el esfuerzo por desmantelar estructuras que afectan tanto al deporte como a la seguridad ciudadana.