La situación en Aguas Blancas se agrava tras la imputación del intendente libertario Carlos «Conejo» Martínez, vinculado a presuntos nexos con el narcotráfico. El Ejecutivo Provincial evalúa presentar un proyecto de intervención ante la legislatura, luego de que Martínez, junto al juez Claudio Parisi y el abogado Roberto Ortega Serrano, fuera acusado de obstruir la investigación del asesinato de su hermano, César Daniel Martínez, en lo que se cree fue un ajuste de cuentas. Datos obtenidos del celular del intendente revelaron conversaciones confidenciales con Ortega Serrano sobre la causa.
Las investigaciones también sacaron a la luz solicitudes de allanamientos sobre propiedades del intendente, lo que intensificó las sospechas sobre su implicación en actividades delictivas. Además, el Procurador García Castiella denunció al juez Parisi por presunta recepción de coimas, complicando aún más el panorama. Este escándalo desató una serie de reacciones judiciales y políticas que han aumentado el clima de incertidumbre en la región.
Ante la acumulación de pruebas y la gravedad de las acusaciones, fuentes del Ejecutivo Provincial señalan que la situación de Martínez es «insostenible», lo que podría llevar a la intervención del municipio. Esta medida se plantea como un esfuerzo para restablecer el orden y la confianza en la administración pública de Aguas Blancas, afectada por una creciente desconfianza.