Se produjo una fuga en la cárcel federal de General Güemes, donde un recluso conocido como el “Señor Fusil” escapó en vísperas del año 2024. La fuga ocurrió gracias a dos aberturas en el alambrado del patio interno del pabellón B del Funcional 4 y cerca de la Torre Puesto 1 bis. Se cree que utilizó un alicate, un objeto prohibido, para abrir los accesos.
Para superar una zanja en el perímetro, el fugitivo empleó una escalera como puente colgante. Existe la sospecha de que recibió ayuda interna, aunque los detalles se mantienen en reserva para no entorpecer la investigación.
El prófugo, condenado por narcotráfico y otros delitos, plantea interrogantes sobre su ubicación en una prisión con nivel de seguridad mediano a bajo, la razón de su traslado a Salta desde Santiago del Estero y por qué, a pesar de una advertencia previa de Inteligencia Criminal, se permitió su fuga.
Según denuncias previas, se alertó sobre una presunta organización que podía estar liderada por la novia del “Señor Fusil”, quien cumplía prisión domiciliaria en Escobar. A pesar de la investigación, no prosperó, pero se advirtió sobre posibles planes de evasión.