El duro sindicado de los empleados de la industria del neumático quedó con escaso margen para mantener su interminable paro. Ayer el Gobierno lo emplazo a sentarse, negociar y llegar a un acuerdo salarial con las empresas para reactivar de inmediato la actividad de este sector de la industria automotriz.
El ministro de Economía, Sergio Massa, cuestionó ayer el conflicto de los trabajadores del neumático y consideró que no se puede ser «rehén de caprichos» de un «grupo chiquito».
El funcionario nacional también advirtió que liberará la importación de neumáticos si hoy no se llega a un acuerdo con los sindicatos en la reunión con los empresarios, programada en el Ministerio de Trabajo.
«No podemos ser rehenes de caprichos y que un grupo muy chiquito ponga en riesgo 150 mil empleos», resaltó el titular del Palacio de Hacienda, que también sostuvo que «Argentina no se puede dar el lujo de perder casi 40 millones de dólares por día».
Massa se expresó de esta forma al encabezar un encuentro con representantes de Adefa (Asociación de Fabricantes de Automóviles), AFAC, Toyota, UOM, Smata, en el que le pidieron que el Gobierno interceda para que le encuentre una salida a esta grave situación que afecta a la industria nacional.
Impacto negativo
«Decirles que estamos a disposición, que entendemos la gravedad del problema, sobre todas las cosas porque el sector automotriz y autopartista, tanto empresarios como trabajadores y toda la cadena de valor nos ayudó a poner en marcha una ley ejemplar para la economía argentina. Segundo, porque entendemos que lo que empieza a ponerse en riesgo son 145.000 puestos de trabajo. Empiezan a ponerse en riesgo casi 40 millones de dólares por día de pérdida», resaltó el ministro de Economía.
Luego de varios días de un conflicto creciente, Massa sostuvo: «Y Argentina no se puede dar el lujo de perderlos. Y entendemos el riesgo que representa perdernos más de 200 millones de dólares de exportaciones de acá a fin de año. Y entendemos que no podemos ser, de ninguna manera, rehenes de situaciones de inflexibilidad, por situaciones de inflexibilidad, casi de capricho, y mucho menos que un grupo muy chiquito ponga en riesgo 150.000 empleos, más de 1.000 autopartistas, todas las terminales automotrices».
«En primer lugar, vemos una situación que nos llama la atención que es, desde que se inició el conflicto, el crecimiento de las medidas cautelares a favor de importaciones. Es llamativo», consideró el funcionario nacional, acompañado por el secretario de Desarrollo Productivo, José Ignacio de Mendiguren.
Anunció que «la Aduana, como parte de este equipo, ha tomado una decisión de hacer un proceso de auditoría y retención de stocks».
«Todo el stock retenido en la Aduana y todo el stock incautado en la Aduana va a ser puesto a disposición de las terminales automotrices para que revisen qué les sirve y el Estado va a asumir la responsabilidad de ponerlo a disponibilidad de las terminales para que puedan seguir produciendo, porque entendemos también que, de alguna manera, tenemos que mostrar no solo la voluntad sino la determinación de garantizar el funcionamiento del sector automotriz y autopartista», resaltó.
Y agregó: «Quiero decirles, además, que si mañana (por hoy) eventualmente no se resolviese el conflicto vamos a habilitar a las empresas fabricantes como importadores de emergencia y les vamos a habilitar la posibilidad de importar todos los neumáticos que necesiten para abastecer a las automotrices con un mecanismo de emergencia de pago, a los efectos de que no se detenga todo el sector automotriz y autopartista, y que no extorsionen al sector sobre la base del conflicto».
f:El Tribuno