Según los informes, el Departamento de Defensa de Estados Unidos está preparando tropas para una posible evacuación de emergencia de ciudadanos estadounidenses y personal diplomático de Sudán en medio de la creciente violencia en el país.
La situación en Sudán ha empeorado en los últimos días, con enfrentamientos entre las fuerzas militares y civiles que han dejado cientos de muertos y millas de heridos. Las Naciones Unidas han descrito la situación como «completamente escandalosa» y han llamado a un alto el fuego y un diálogo entre las partes.
El presidente Biden ha tomado la decisión de trasladar tropas y equipos a una base cercana en Djibouti en caso de que sean necesarios, después de que un convoy diplomático estadounidense fuera atacado en Jartum y dos altos al fuego incipientes colapsaron rápidamente.
John Kirby, coordinador de comunicaciones estratégicas para el Consejo de Seguridad Nacional, dijo que aún no se ha tomado ninguna decisión sobre pedirle a alguien que evacúe y que si se toma la decisión, tendrán más que decir en ese momento sobre el tamaño y la escala.
El Departamento de Estado está tratando de reunir al personal en una ubicación central en Jartum, la capital. La decisión de reposicionar tropas fue una consecuencia de las cosas que se han aprendido durante el último año y medio, como la evacuación de Kabul en agosto de 2021 y la salida más ordenada de los funcionarios estadounidenses de Ucrania antes del inicio de la invasión rusa el año pasado.
El Departamento de Estado ha anunciado durante mucho tiempo a los estadounidenses que no viajaron a Sudán, y los funcionarios estadounidenses que cualquier evacuación no incluiría a ciudadanos estadounidenses allí a título no oficial.
¿Cuál es la situación actual en Jartum después del estallido de la violencia entre los dos generales rivales en Sudán?
La situación en Jartum es caótica y peligrosa para los civiles después de que se rompiera un acuerdo para compartir el poder entre dos generales rivales en Sudán. Las fuerzas armadas de ambos bandos han estado luchando y cientos de civiles han resultado muertos y miles heridos.
Las tropas duramente armadas han saqueado y ocupado numerosas residencias y oficinas privadas, y la violencia sexual contra civiles también ha sido reportada.
La situación humanitaria es prácticamente imposible debido a que las operaciones humanitarias son interrumpidas y los trabajadores humanitarios no pueden salir de sus refugios. Los aeropuertos, hospitales y negocios en la capital están cerrados, y la población dependiente de la ayuda para sobrevivir se encuentra en una situación crítica.