El presidente Javier Milei reafirmó este martes su postura sobre la seguridad durante un acto en Casa Rosada, en el que entregó sables y despachos al personal de las Fuerzas Armadas. En un discurso contundente, el mandatario destacó que su gobierno se centrará en fortalecer el rol de las fuerzas del orden y en marcar una clara diferencia entre quienes respetan la ley y quienes la transgreden.

«Con nosotros, los buenos son los de azul y los malos son los delincuentes», aseguró Milei, enfatizando su respaldo a la policía. En el mismo acto, el presidente anunció la prohibición de traslados de presos bajo argumentos de identidad de género, una medida que se toma tras los hábeas corpus presentados por el líder de Los Monos, ‘Guille’ Cantero, quien afirmó autopercibirse mujer.

«Esto es una barbaridad que sólo en un país con valores trastocados podría permitirse», criticó Milei. «Con nosotros, esta estupidez se termina. Los delincuentes no podrán utilizar la identidad de género como excusa para cambiar de penal», agregó, señalando que casos como el de Cantero suelen esconder intentos de aprovecharse de condiciones penitenciarias más laxas o de reclusas en establecimientos. femeninos.

El presidente instó a los gobiernos provinciales a replicar esta medida en sus sistemas penitenciarios y advirtió que quienes no lo harán estarán «premiando la creatividad de los criminales y faltando el respeto a las víctimas».

Acompañado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, Milei subrayó la necesidad de devolver prestigio a las Fuerzas Armadas y de Seguridad, aludiendo a lo que calificó como un «ninguneo» en gestiones previas: «Se llegó al absurdo de liberar presos o castigar a policías por cumplir con su trabajo».

Milei delineó los tres pilares fundamentales de su política en seguridad: «Primero, el que las hace las paga; el delito debe ser castigado en todo momento y lugar. Segundo, el orden público es sagrado, la calle es de todos y no puede ser secuestrada por unos pocos Tercero, los buenos son los de azul, los malos son los delincuentes».

“El Estado debe proteger a las víctimas y castigar a los victimarios”, enfatizó el presidente. Además, sostuvo que la misión de su gobierno es sentar bases sólidas para el desarrollo del país, con seguridad como uno de los ejes clave. «Entendemos que un día dejaremos de ser gobierno, pero nuestro legado debe permanecer, y las Fuerzas de Seguridad serán protagonistas de este cambio de paradigma», señaló.

Milei concluyó su discurso destacando la importancia de la seguridad pública para el crecimiento del país: «Las leyes separan a los hombres de las bestias, y están para cumplirse. Esa será la base de nuestra grandeza como Nación».