El líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, quien fue citado por la Justicia en el marco de una investigación por extorsión y administración fraudulenta, ahora es acusado de haber firmado facturas de una empresa fantasma para justificar gastos de la organización.
Una factura B emitida por la empresa Coxtex S.A. generó alarmas en la AFIP a los pocos meses de la creación de la empresa. El organismo ya sospechaba de facturas apócrifas emitidas por esta sociedad y ahora se ha revelado que una de ellas llevaba las firmas de Eduardo Belliboni y Mariano Cetanni.
Según las sospechas, la factura revelada por La Nación fue utilizada para justificar los subsidios recibidos por la intermediación en los planes Potenciar Trabajo, donde teóricamente la organización proporcionaba herramientas de trabajo.
El documento firmado por Belliboni tiene un monto de $3.644.418 y está fechado el 14 de octubre de 2021. Los productos listados incluyen: 12 notebooks Lenovo Ideada S 340 gris 15.6″ Intelcore 15; 11 softwares Pro Tools Perpetual (descritos como sistemas de producción de audio para artistas, productores musicales y profesionales del sonido para la creación de música, películas y programas de televisión), y cuatro parlantes inalámbricos Como 700 Sony.
Hasta el momento, se estima que el Polo Obrero ha recibido transferencias por un total de $360 millones.
Ante la noticia, el dirigente social se justificó: “A mí nunca me dijeron desde el Ministerio que era trucha. Nosotros hacíamos la rendición en la secretaría de [Emilio] Pérsico. Después le enviaban al resto, a un circuito que no manejaba él, que era un área de legales. No sabíamos. Sí supimos de otra empresa, Varela Construcciones, que nos informaron que nos había dado una factura falsa, y la denunciamos nosotros”.
“No me acuerdo si alguien me la acercó, los compañeros que trabajan en el depósito buscan precios. No sé con quien tratábamos de ahí”, sostuvo sobre la factura en cuestión.