La puesta en marcha de la reversión del Gasoducto Norte, programada inicialmente para julio de 2024, se retrasará y no estará lista para el invierno, lo que hace urgente negociar el suministro de gas para el norte argentino. La alternativa transitoria propuesta por TGN tampoco podrá solucionar este problema, ya que dependía de la finalización anticipada del nuevo gasoducto.
Ante esta situación, el Gobierno argentino deberá realizar negociaciones complejas con Bolivia, Brasil y Chile para asegurar el suministro de gas para este año.
La empresa estatal Enarsa adjudicará esta semana la construcción del tramo principal La Carlota-Tío Pujio, luego de aprobar las propuestas técnicas de tres empresas constructoras en la licitación para revertir el Gasoducto Norte. Esta infraestructura es crucial para abastecer de gas natural a provincias del norte como Córdoba, Tucumán y Salta.
Debido a los retrasos en el proceso de licitación, causados por el cambio de gobierno, es poco probable que la reversión del Gasoducto Norte esté lista para el invierno, incluso con condiciones favorables. Según informó el sitio especializado ‘EconoJournal’, el nuevo gasoducto La Carlota-Tío Pujio no obtendrá la aprobación para funcionar hasta el 30 de agosto, por lo que es probable que la obra esté terminada hacia septiembre, al final de la temporada invernal, según fuentes privadas.
Ante esta situación, el gobierno deberá buscar alternativas para garantizar el suministro de gas en el norte del país durante los meses de frío, cuando aumenta el consumo residencial.